El proyecto arquitectónico busca preservar la esencia y el carácter original del inmueble, conservando su forma y los elementos más representativos de su estilo arquitectónico. Se trata de una intervención que valora la historia del edificio y pone en primer plano su legado estético y urbano, rescatando detalles constructivos que aportan identidad y autenticidad al conjunto.

La propuesta respeta el esquema funcional original: comercio en planta baja y tres departamentos por nivel, distribuidos de forma armónica desde el primer hasta el cuarto piso. No obstante, se introducen ajustes sutiles en la distribución interior de los departamentos, pensados para responder a las nuevas dinámicas sociales y necesidades habitacionales contemporáneas. Estos cambios permiten mejorar la funcionalidad de los espacios sin alterar su estructura base, facilitando una convivencia más eficiente entre lo histórico y lo actual.

Además de la restauración formal y funcional, el proyecto contempla mejoras en eficiencia energética, accesibilidad y confort, integrando soluciones técnicas discretas que garantizan la sostenibilidad del edificio en el largo plazo. Así, la intervención no solo conserva el valor patrimonial, sino que lo reinterpreta y proyecta hacia el futuro.